¡Hola!
Parece que le estamos cogiendo el gustillo Claudia y yo a hacer recetas juntas porque una vez más nos juntamos en su casa a hacer recetas para el blog. Lo bueno es que además de divertirnos mucho haciendo la receta y las fotos, luego comemos juntas y charlamos. La verdad es que nos lo pasamos muy bien juntas y eso es lo mejor de todo, ¿verdad?
No nos enrollamos más y os dejamos la receta:
Ingredientes:
2 zanahorias medianas
Un calabacín mediano
Una berenjena mediana
200 ml de nata para cocinar
100grs de queso tipo Philadelphia
Un huevo
Un paquete de masa brisa
Preparación:
Lo primero que hacemos es forrar el fondo de nuestro molde redondo (de aproximadamente 22 cm de diámetro) con una capa de masa brisa a la que le hacemos unas marcas con la punta del tenedor para que no haga burbujas al hornear.
Lo llevamos al horno a 180ºC durante 15 minutos, cubierto con una hoja de papel de horno sobre la que añadimos un buen puñado de garbanzos que utilizamos para que la masa se hornee sin perder la forma del molde.
Mientras tanto, pelamos las zanahorias y con la ayuda de un pelador, vamos sacando lonchas muy finas.
Hacemos la misma operación con el calabacín y la berenjena, laminándolas con un pelador (si no tenemos podemos hacerlo con mucho cuidado con un cuchillo afilado, intentando sacar las láminas lo más finas posibles).
En un recipiente, mezclamos el huevo con la nata y el queso philadelphia, hasta obtener una mezcla homogénea.
Cuando hayan pasado los 15 minutos, sacamos nuestro molde del horno, le retiramos el papel de hornear con los garbanzos y dejamos entibiar. Cuando nuestra masa esté tibia, volcamos dentro la mezcla de nata, queso y huevo.
A continuación, vamos colocando las láminas de verdura, alternando zanahoria, berenjena y calabacín. Las disponemos en forma de espiral, partiendo desde el exterior, intentado que las varias láminas estén lo más juntas posible y procurando que el lado que queda hacia arriba no se empape con la nata.
Cuando terminemos de realizar la espiral de verduras y hayamos colocado la parte central, podemos añadir más láminas en los huecos que nos hayan quedado, procurando respetar el dibujo.
Una vez terminada nuestra obra de arte, la llevamos al horno, a 180º, esta vez durante unos 30 minutos, vigilando de vez en cuando que nuestras verduras no se quemen.
La receta en sí es sencilla pero lleva bastante tiempo colocar las verduras, os avisamos para que lo tengáis en cuenta.
Tenemos que decir que la tarta está muy rica y eso que a yo (Ary) no soy muy amiga de las verduras.
Esperamos que os haya gustado la receta y que nos dejéis vuestra impresión en los comentarios.
Un besito y ¡feliz día!
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